Mineral :

s. m. [de mina] – Elemento constitutivo de la roca en proporciones mayores, accesorias o trazas. Una roca puede estar formada por una o varias especies minerales. A escala microscópica, el mineral está representado por átomos o grupos de átomos dispuestos regularmente o no en las tres dimensiones del espacio. Por lo tanto, un mineral se caracteriza por una fórmula química (ej.: Cuarzo = SiO2) y una estructura cristalina (ej.: Pirita = cúbica) (modificado según Foucault y Raoult, 2010, Michel, 2016 y Hochleitner, 2018).
adj. – Opuesto a lo orgánico, es decir, diferente de la materia soporte de los seres vivos compuesta por cadenas carbonadas complejas. (modificado según Foucault y Raoult, 2010 y Michel, 2016)
Para identificar un mineral, es necesario observar y/o medir sus propiedades físicas. Existen multitud de herramientas y métodos para estimar estas propiedades. Entre ellas se encuentran:
Existen muchas formas minerales, a veces sorprendentes. La mayoría de las especies minerales pueden mostrar diferentes formas según sus condiciones de cristalización. Sin embargo, estas formas dependen siempre del sistema cristalino.
Algunos minerales poseen colores característicos, otros pueden mostrar una gran variedad de ellos.
Es la capacidad de un mineral para dejar pasar o reflejar la luz. Un mineral puede ser transparente (deja pasar la luz), translúcido (deja pasar parte de la luz) u opaco (no deja pasar la luz).
El brillo es la forma en que el mineral refleja la luz. El nombre del brillo suele asemejarse a un tipo de material conocido cotidianamente: vítreo, metálico, graso, …
La fractura de un mineral muestra cómo se rompe fuera de los planos preferentes de fractura, llamados planos de exfoliación.
La raya es un color que se puede observar (o no) al frotar el mineral sobre una superficie blanca como una placa de porcelana. A diferencia del color externo, varía poco para una misma especie mineral.
Es la capacidad del mineral para rayar a otro. Se mide en la escala de Mohs entre 1 para el más blando y 10 para el más duro. La dureza de un mineral no debe confundirse con su resistencia, ej.: el diamante, muy frágil, tiene una dureza de 10.
La densidad de un mineral se calcula como la relación entre la masa de una muestra de cierto volumen y la masa del mismo volumen de agua. También se puede estimar una densidad relativa con el pesado en mano, aunque esta técnica es menos precisa.
El magnetismo es la capacidad del mineral para dejar pasar el campo magnético. Algunos minerales como la magnetita y la hematita pueden ser atraídos por un imán.
La radiactividad es la capacidad de un mineral para emitir radiaciones radioactivas. Se mide con aparatos como el contador Geiger. La radiactividad puede ser fuerte en minerales que contienen elementos como el radón o el uranio.
El grupo de las amiantas incluye varios minerales fibrosos utilizados en la industria por ciertas características físico-químicas (resistencia a altas temperaturas, incombustible, resistencia eléctrica/mecánica/química, poder absorbente, flexibilidad, …). Desafortunadamente, algunas de estas características también son perjudiciales para el medio ambiente y la salud.
La fluorescencia es la capacidad de un mineral para emitir casi instantáneamente una radiación electromagnética en respuesta a su exposición a una radiación electromagnética de longitud de onda menor, como la luz ultravioleta.